martes, 7 de junio de 2011

La nueva maternidad

Desde "tenemos tetas" se nos propone a las madres blogeras que creemos un post acerca de lo que es para nosotras la “nueva maternidad”. Recojo el guante.
Hay una oleada masiva de madres comprometidas con el hecho de serlo, que hemos decidio criar a nuestros hijos con apego, cariño, ofrecíendoles nuestro tiempo, nuestra leche, nuestro alma.
Madres que intentamos hacer poesía para ellos cada día, que ponemos nuestros culos en el suelo de sus habitaciones, que escuchamos antes de imponer, que abrazamos antes que ignorar, que mostramos antes que exigir...
Oleadas de madres con padres, con otras madres, solas, con abuelos o bisabuelas igualmente comprometidos, haciendo tribus, tribus presenciales y tribus virtuales, compartiendo a través de las redes nuestras experiencias, ayudándonos para hacernos mejores y hacer mejores a nuestros hijos.
Madres que creemos en la utopía de que el mundo de nuestros hijos, presentes o futuros, será un mundo mejor, porque ellos conseguirán hacerlo mejor.
Madres que queremos dejarles una herencia de seguridad y optimismo.
Madres que se abrazan a la naturaleza y a sí mismas.
Madres musicales, madres mágicas, madres lobas, madres cuentistas o lectoras, madres árbol, madres flor, madres.
Pero ¿realmente esta maternidad es nueva o simplemente somos más visibles porque la tecnología hace que podamos mostrarnos más? ¿acaso mi abuela no era una “nueva madre”, críando a sus tres hijos con amor, teta y canciones? La mayoría de las cosas que hacemos ya estaban inventadas, son sabiduría popular, está en nuestra memoria genética... Seguramente las nuevas madres somos más antiguas y ancestrales de lo que pensamos, sólo que adaptadas a la contemporáneidad (tecnología, relaciones sociales, manejo de la información, etc.).
La influencia social, las leyes de conciliación, la lucha por la igualdad de la mujer han ido en zig-zag respecto a la maternidad, han dado un paso para delante y dos para atrás y todo ello ha hecho que muchas madres, en las últimas generaciones, que eran -y son- “nuevas madres” no hayan podido ejercer la maternidad de esta manera plena y consciente. Pero ahora tenemos la posibilidad de elegir y, lo que no podemos elegir, podemos luchar para cambiarlo, hacer nuestra madre-revolución, juntas y poderosas. Madres.

3 comentarios:

  1. Qué precioso post! Me encanta que recojáis el guante y escribáis estos preciosos textos! Gracias, un abrazo!!!

    ResponderEliminar
  2. Enhorabuena! Has resultado ganadora! Por favor, envíame un email con tus datos para enviarte los libros.
    ¡Un abrazo grande!

    ResponderEliminar
  3. Me encanta! no lo habría sabido expresar mejor!!!

    ResponderEliminar